Tendencias tecnológicas para 2016
- Military Aerospace
- 8 feb 2016
- 3 Min. de lectura

El año 2016 promete ser movido en el ámbito político, según escribe John Keller en Military & Aerospace, debido a la guerra global contra el terrorismo, que no aminora, las elecciones presidenciales en EEUU en otoño y el aumento de la tensión en el Pacífico occidental, consecuencia de la expansión militar de China. En estas condiciones, veremos aumentar el énfasis puesto en algunas tecnologías militares, tales como la guerra antisubmarina y el sonar distribuido, la ciberguerra, los vehículos aéreos no tripulados para uso de los tres ejércitos (incluidos los embarcados), el radar adaptativo y de guerra electrónica (EW), radar y sonar pasivo, realidad aumentada, armas láser, vehículos submarinos no tripulados (UUV) nodrizas, capaces de desplegar fuerzas del reconocimiento encubiertas y UUVs de ataque, desarrollo de tecnologías de vigilancia persistente y minería de datos avanzada para descubrir posibles amenazas terroristas en los medios sociales. En relación con la guerra antisubmarina, será importante hacer frente a los desarrollos chinos en la construcción de submarinos. China no sólo está comenzando a desplegar submarinos de ataque nucleares, también despliega submarinos lanzadores de misiles balísticos en todo el mundo, a la vez que desarrolla misiles balísticos nucleares, diseñados para atacar a los grupos navales nucleados en torno a portaaviones estadounidenses. El sonar distribuido (‘cooperative sonar’), implica el despliegue de muchos sensores pasivos diferentes, en lugares también diferentes, que trabajan juntos para identificar y rastrear blancos distantes. La ciberguerra sigue siendo de importancia crítica, ya que se sospecha que hackers rusos, chinos e iraníes han tenido acceso a agencias del gobierno y a las redes de energía de EE.UU, con objeto de detectar debilidades. Los UAVs de transporte y los barcos de carga (‘shipboard cargo deliver’), recibirán cada vez más atención en 2016, al igual que las aeronaves de ala rotatoria y fija no tripuladas, para el sostenimiento de tropas expedicionarias, sin necesidad de arriesgar vidas. Los radares adaptativos y las tecnologías adaptativas de guerra electrónica (EW) están progresando de manera que las tecnologías digitales pueden ser explotadas para reprogramar los sistemas de radar y EW sobre la marcha, para adaptarse a las condiciones cambiantes. Las tecnología de radar y sonar pasivos serán muy importantes, debido a su carácter sigiloso. Ambas tecnologías trabajarán sin transmitir señales activas y descansarán en el uso del procesamiento digital de señales. La realidad aumentada consiste en la superposición de iconos para identificar objetivos, amigos, obstáculos y otras imágenes que aparecen en las miras de las armas, ‘head ups’, gafas de los soldados y otros dispositivos ópticos. La idea es mezclar imágenes en tiempo real, con gráficos por ordenador, para dar a los combatientes una vista mejorada del campo de batalla. Las armas láser están a punto de adquirir un papel líder como armas aéreas de combate, así como navales de superficie. La gran ventaja de las armas láser, al menos en teoría, es que nunca se quedan sin municiones, en tanto dispongan de fuente de alimentación. La vigilancia permanente es tan importante en la guerra contra el terrorismo como para la guerra convencional, como siempre lo ha sido. La idea es vigilar áreas específicas durante largos periodos de tiempo, filtrar lo que es rutina, y enfocarse en las cosas que se salen de lo ordinario, lo que ayudaría a predecir ataques terroristas y otros actos militares no amistosos. La tecnología de minería de datos en 2016 probablemente intensifique el análisis de los canales de medios sociales, para permitir que EE.UU. Y sus aliados identifiquen sospechosos de ser terroristas en base al uso que hacen de estos medios. Podría ser un gran avance en la identificación de terroristas entre los inmigrantes en su camino hacia EE.UU.