El Big Data no es nada nuevo para la Aviación
- Aerospace and Technology
- 10 feb 2016
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El rendimiento de los aviones en servicio se controla no sólo en beneficio del propietario/operador del avión, sino también de los fabricantes y las agencias reguladoras gubernamentales. La aviación tiene uno de los mejores registros de seguridad en todo el sector del transporte. Parte de ese registro se puede atribuir a la práctica común de la recopilación, la manipulación y el estudio de los datos operativos recogidos de aviones en servicio. El defecto de una pieza de la aeronave, el funcionamiento defectuoso del sistema o la aplicación errónea de los procedimientos resultan con frecuencia en un evento catastrófico. Desde los primeros días de la aviación, el precio del fracaso era a menudo la pérdida de vidas, la destrucción de la propiedad y la ruina financiera. Los primeros aviadores aprendieron a convertirse en recopiladores de datos. En esos datos se encuentran frecuentemente las contestaciones a incidentes que ocurren con frecuencia. Esta es la forma, en las que los humanos aprendieron a volar. Hoy en día, los aviones modernos incorporan "cajas negras", que graban meticulosamente toda la información asociada con el vuelo del avión. Posiciones del acelerador, estado de combustible, velocidad del aire, altitud, el rendimiento de los sistemas hidráulicos, posición de las superficies de control y todo tipo de otros datos, que se recogen y registran para el análisis posterior. Las conversaciones en la cabina también se registran para proporcionar pistas sobre por qué algo ocurrió o no según lo prescrito. Los aviones están cada vez más conectados. En el contexto de la Internet de las cosas, esto significa un incremento potencialmente enorme de la cantidad de datos a almacenar y analizar sobre una pieza, avión o vuelo determinado. En un reciente artículo se discute el número de sensores incorporados en un motor a reacción moderno, pero lo cierto es que los que los datos generados y recogidos ascienden a varios terabytes por hora. Esa es una cantidad asombrosa de información, que gracias al big data se consigue explotar. Esto es bueno para los usuarios del transporte aéreo, para las aseguradoras y para los explotadores de aeronaves. Esto es big data en su máxima expresión. La capacidad para recoger, almacenar y extraer información útil, a partir de esa cantidad masiva de datos será uno de las exigencias para tener éxito en el altamente competitivo ámbito aeroespacial.
